“Es una pena que el True Sight esté descontinuado. Era una celebración de Dota”, afirmó Nightfall. La serie de documentales que acompañaba al torneo se había convertido en un símbolo del espíritu competitivo del juego, pero su final podría ser un reflejo del desinterés creciente de Valve. Además, el significativo descenso en el prize pool del torneo ha sido un motivo de descontento entre los jugadores y fanáticos.

El jugador también hizo hincapié en la aparente desconexión de Valve con la comunidad de Dota 2. “Valve, diría yo, empezó a renunciar a Dota en ese momento”, comentó. Recalcó que muchos de los desarrolladores que una vez estuvieron al frente del proyecto han dejado la empresa, lo que ha llevado a una falta de atención sobre las necesidades del juego y de su competitividad.

A pesar de la notable influencia de The International en Dota 2, Nightfall sugirió que el juego podría sobrevivir sin este torneo. “Me parece que Dota podría vivir sin el The International”, afirmó, señalando que el auge de otros títulos en el mercado podría haber llevado a Valve a priorizar proyectos más lucrativos y menos arriesgados. Este cambio de enfoque podría ser una preocupación para una comunidad que ha construido su identidad en torno a este gran evento.

La sombra de la incertidumbre también se cierne sobre la calidad del contenido y la promoción de Dota 2. “Incluso si hablamos de algún tipo de ganancia, me parece que ganan mucho más dinero con otros proyectos y, en general, con Steam”, explicó. La plataforma de distribución digital de Valve parece haber tomado precedencia sobre la dedicación a Dota 2 y su ecosistema de competencias.

La afirmación de Nightfall plantea una pregunta crucial para la comunidad: ¿qué pasaría con Dota 2 si The International dejara de existir? Muchos jugadores y aficionados sentirían un vacío, ya que este torneo ha sido el pináculo de la competitividad y un evento que une a la comunidad global del juego.

Finalmente, el estado futuro de Dota 2 y de su torneo más significativo está en la balanza. Con la falta de atención de Valve y la evolución del panorama competitivo, los jugadores se enfrentan a un dilema que podría definir la vida del juego tal como lo conocemos. ¿Podrá Dota 2 mantener su esencia sin The International? La respuesta a esta pregunta podría cambiar la historia del juego para siempre.